Concepto de Tipo de Cambio

El tipo de cambio podemos definirlo como el número de soles que debemos pagar para obtener una unidad de moneda extranjera. Este se determina bajo el libre mercado donde el BCRP interviene para evitar fluctuaciones de la moneda, ante una brusca subida o una brusca bajada. El objetivo del BCRP es evitar una pronunciada depreciación de la moneda, algo mucho más común que el evitar una pronuncada apreciación de la misma.

El tipo de cambio lo utlizamos para transacciones corrientes como son la compra de propiedades, vehículos, elaboración de balances, análisis económicos, compra y venta moneda. En el caso del Perú, desde hace más de 20 años que la economía se encuentra dolarizada, teniendo en cuenta que en los últimos 10 años, esta tendencia ha disminuído, teniendo una economía con una mayor transacción en soles.

Tipos de Cambio

Tipo de Cambio Real (TCN)

El tipo de cambio es el precio de una unidad de moneda extranjera expresado en términos de la moneda local. A su vez, encontramos dos Tipos de Cambio Nominal: tipo comprador y tipo vendedor, dado que las entidades financieras obtienen una ganancia por intermediar en el juego de la oferta y la demanda de moneda extranjera. La diferencia entre ambas tasas, es lo que se conoce como «spread».

Al igual que sucede con los bienes y servicios, el «precio» de una unidad de moneda extranjera, o sea el Tipo de Cambio, varía en el tiempo. Cuando aumenta, se dice que hay una depreciación de la moneda local (frente a la moneda extranjera a la cual la estemos comparando), ya que debo pagar más unidades de moneda local por cada unidad de moneda extranjera.

Cuando el Tipo de Cambio disminuye, se dice que hay una apreciación de la moneda local. A modo de ejemplo local, podemos decir que actualmente el Gobierno interviene diariamente en el mercado de divisas comprando dólares a través del Banco Central porque quiere evitar una apreciación del Sol.

Tipo de Cambio Real (TCR)

Es el precio de los bienes en un país extranjero, en relación con el precio de los bienes en el mercado local, ambos llevados a una misma moneda. De esta simple definición, se desprende que este ratio no tiene unidades ya que se cancelan, y que su valor dependerá de los valores base que se tomaron para los índices de precios (se utiliza en general el Índice de Precios al Consumidor = IPC). Por lo tanto, no tiene sentido hablar del Tipo de Cambio Real si no es en comparación con un determinado año, o de su evolución a lo largo del tiempo.

Si tenemos un índice de precios calculado sobre una determinada composición de una canasta de productos, como por ejemplo el Índice de Precios al Consumidor (IPC), se obtiene el TCR de la siguiente manera:

TCR país1,país2 = TCNpaís1,país2 × IPCpaís2 / IPCpaís1

El TCR mide, entonces, el poder adquisitivo de la moneda extranjera en el mercado local. Escribimos en la ecuación anterior los subíndices en TCR y TCN simplemente para recordar que el TCR se puede calcular para cualquier par de monedas y no solamente para el que más conocemos en el país, que es el del Sol contra el Dólar estadounidense.

La variación puede deberse a una apreciación o depreciación de la moneda local (variación en el tipo de cambio nominal), o a efectos inflacionarios o deflacionarios, en el mercado local y/o en el extranjero. Por eso es importante un análisis más profundo de las causas y no contentarse sólo con ver su valor resultante.

Al igual que en el caso del TCN, decimos que hubo una apreciación real de la moneda local, si disminuye el Tipo de Cambio Real, y una depreciación de la misma si el TCR aumentó.

Veamos como ejemplo lo sucedido en los últimos años en Argentina: Durante los primeros momentos de la Convertibilidad, si bien por un lado el TCN estaba fijado por ley en 1$/U$S, tuvimos una «inercia inflacionaria» superior a la inflación de los Estados Unidos. Esto implicó un descenso del TCR, o sea una apreciación real del peso. Luego de la crisis del 2001, cuando se liberó el Tipo de Cambio Nominal, y llegó incluso a picos superiores a los 4$/U$S, si bien sufrimos una importante tendencia inflacionaria, ésta no fue tan grande como la depreciación del peso (nominal), por lo cual hubo un importante aumento del TCR, es decir, una marcada depreciación real del peso, que en teoría se diluiría si la inflación continúa creciendo pero se mantiene el TCN aproximadamente constante. Más allá de que el país se pudo haber puesto «de moda» como atracción turística, sin duda el contar con tal crecimiento del turismo internacional en los últimos años se debe en gran parte a la depreciación real del peso (hoy, a diferencia de la época de la Convertibilidad, somos relativamente «baratos»).

Tipo de Cambio Fijo y Variable

Por otro lado, el tipo de cambio se puede clasificar como fijo o flexible, en función del grado de libertad de fluctuación de la moneda en los mercados de divisas:

El tipo de cambio fijo se da cuando el valor de una moneda está determinado, respaldado y mantenido por el banco central del país. Esto no significa que su valor sea inalterable. Las autoridades monetarias pueden, si lo estiman conveniente, modificar el valor de referencia de su moneda: si la modificación es al alza, estamos ante una revaluación y, si es a la baja, hablamos de devaluación.

El tipo de cambio flexible es cuando se deja que una moneda fluctúe libremente en los mercados de divisas; por tanto, su valor viene determinado por la oferta y la demanda de dicha moneda. Bajo este sistema, las oscilaciones cambiarias están causadas por las fuerzas del mercado; en tal caso, hablamos de apreciación cuando la oscilación es al alza y de depreciación cuando es a la baja.

Variaciones del Tipo de Cambio

Los principales factores que generan fluctuaciones en el dólar tanto hacia arriba como hacia abajo, en economías emergentes como la nuestra, son los siguientes:

Subida del precio del dólar

Esto obedece a las decisiones de la FED (Reserva Federal de los EEUU) de aumentar sus tasas de interés de referencia. La razón se encuentra relacionada con la cuenta financiera y la movilidad de capitales a corto plazo. Los inversionistas buscan constantemente obtener la máxima rentabilidad posible mediante la compra y venta de activos, por lo que, si el mercado financiero estadounidense cada vez empieza a otorgar una mayor tasa de interés, los inversores estacionados en otros mercados van a estar dispuestos a colocar algunos de sus fondos en títulos financieros norteamericanos. Para ello requerirán dólares, lo que impulsará la demanda por esta moneda y en consecuencia, el incremento de su valor frente a otras divisas

Disminución del precio del dólar

Se genera ante una situación donde existen expectativas de una caída del crecimiento de la economía americana. Para nuestro país, dicha situación puede influir a su vez en la estabilidad de precios y en el crecimiento, por ejemplo, la caída del valor del dólar disminuye el precio de las importaciones, dado que comprar productos de Estados Unidos resultaría más barato, impactando directamente en la inflación a través de los precios de bienes de consumo importados.

Especulación

Un tercer factor que influye en las fluctuaciones del tipo de cambio es la especulación, el cual sería un indicador de burbuja (artificial) en el precio de la divisa. La especulación se produce cuando ante un aumento del precio del dólar, las personas optan por comprar hoy ya que esperan que el precio continué al alza; lo que genera presiones en la demanda de la divisa.

Cabe precisar que al igual que muchos países emergentes y algunos desarrollados, el Perú tiene al dólar como un actor relevante, ya que es una moneda de uso internacional y sus efectos en pequeña o gran magnitud para la economía, denota su vulnerabilidad frente al sector externo; en este sentido al igual que el oro, el dólar es considerado como un “refugio”, convirtiéndose en una opción de inversión o ahorro.